Mensaje abuela
Porque yo soy como soy?
Vengo como vieja, curvada, cansada del tiempo. Pero ¿por qué me presento así, si los entendidos dicen que el espíritu no tiene edad? Y el negro, aún más viejo, es espíritu sin entendimiento?
He venido de esa manera por varios motivos.
Para mostrar que la sabiduría viene con la experiencia, con la vivencia y eso sólo ganamos con la edad y el correr del tiempo.
Para mostrar la humildad del habla simple, sin rebusco y pretensión, que está al alcance de todos.
Para mostrar que el sufrimiento bien aprovechado, también tras evolución.
La verdad es que no hay nada que pueda hacer.
Mostrar que todo lo que nace en la tierra tiene su ciclo de vida, muerte y renacimiento. Y mostrar que un día tal vez; usted se quedará así también. Porque nadie nace para la semilla.
¡Eso forma parte de mi misión!
No era mi misión venir como niño, o joven, sino como vieja y negra.
En cuanto a la edad de edad,? ¿Quién dijo que no tiene?
El alma sí es infinita.
Pero el espíritu también perece. Por supuesto, que dura mucho más que la carne, pero también llega a su fin. Y lo que sobra es el alma, que es la chispa de Dios dentro de nosotros.
A ti me preguntas: entonces el espíritu es una cosa, y el alma es otra? Y la vena responde: ¡claro que sí! El espíritu es único, es individual. Pero el alma es universal. El espíritu es un cuerpo, que viene después de la carne.
Un cuerpo mucho más sutil, donde la mente trabaja, que guarda el alma. El alma es el soplo de vida, que da la vida a todas las cosas.
El alma es Dios y Él está dentro de todos nosotros. Por eso no podemos escondernos. Por eso somos el templo de Dios.
Es polvo porque somos creativos y todas las cosas sólo existen, porque Él permitió que así fuera.
"Ninguna hoja cae de un árbol sin el conocimiento y la voluntad de Dios" Cuando tomamos conocimiento de nuestra Alma y descubrimos (lo que siempre hemos sabido) que ella es Dios en nosotros.
Nos volvemos uno con Él, nos matamos Él. Entonces varias cosas que habían sentido, dejan de tener. Varias necesidades ya no son necesarias. Estamos en Dios y Dios está en nosotros.
Pocos fuera los que lograron alcanzar esa conciencia. Y pocos de aquí en adelante serán los que lograrán. Pero no cuesta intentarlo. Y en ese intento mejorar y galgar el camino del bien, de la compasión, del amor y de la caridad. Siempre con fe en Dios y en los Orixás. Aprendiendo con los Guías y ayudando a los que necesitan.
Yo soy la Abuela de Guinea de Guinea y este es mi mensaje para ustedes.
Que Ojalá bendiga a todos.
¡Saravá Umbanda!
hermoso mensaje
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